Las posturas de Yoga tienen su nombre en sánscrito, idioma antiguo de la India. Las letras en sánscrito son incompresibles de leer para nosotros. Por ejemplo, el conocido símbolo “OM” está en sánscrito. Los nombres de las asanas en sánscrito revelan algo más sobre las postura que a veces en la traducción a nuestra lengua nos perdemos.
El asana de la foto es una variación de virabhadrasana o postura del guerrero. Virabhadra fue un guerrero mitológico del hinduismo. Creado por el Dios Shiva (el destructor) para vengar la muerte de su esposa Sati. Como Shiva, éste es un guerrero que destruye para crear. Su enemigo es el ego.
Esta variación del guerrero, con su mirada firme hacia adelante en su oponente en estado de alerta, centrado y configurando su objetivo. Es una postura de equilibrio y fortaleza externa e interna. Confianza en uno mismo en que tenemos la fortaleza para sostener y respirar en la postura. Cuanto más respiraciones podamos sentir esta asana, más se manifiestan estas cualidades. Postura ideal para cuando necesitamos poner los pies en la tierra, fijar un rumbo y aumentar la confianza.